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"Las Coyoleras"

 

Autora: Tannya Badilla Solórzano

 

las coyoleras - copia

 

Representación popular de una tradición guanacasteca

"Las Coyoleras"

 

Nombre científico: Acrocomia vinifera.

Nombre común: Palma de Coyol

 

En la actualidad es relativamente poca la información que se posee acerca del coyol. Este árbol se puede encontrar en ciertas zonas de Centroamérica y México.

 

En Costa Rica este árbol se puede encontrar en la zona de Guanacaste, en ciertas partes de la provincia de Puntarenas y Alajuela (Orotina y San Mateo)

 

Este es una palmera característica de las sabanas y faldas secas de las costas del Pacífico, en donde llegan a formar verdaderos bosques. Fue una planta económica de nuestros antepasados ya que ellos extraían de sus tallos una savia muy rica en azúcar, la cual fermentaban para producir bebidas embriagadoras con las cuales animaban sus fiestas.

 

Actualmente el coyol es aún una bebida muy popular apetecida y que de alguna forma aún forma parte del folclor guanacasteco; sin embargo muchos ignoran qué es en realidad y cuales son sus características y propiedades.

 

Algunas personas tienden a confundir el coyol con la palma africana siendo bastante similares. Sin embargo entre estas existen diferencias como por ejemplo en grosor del tallo, color y sabor del vino entre otras.

 

Para tener claro el concepto del "vino de coyol" debemos aclarar que se le llama vino a lo que se fermenta no dentro del tronco, sino a lo que es la "savia" que se fermenta una vez que se destila a través de lo que se le podría llamar una especie de filtro.

 

PROCEDIMIENTO TRADICIONAL DEL COYOL

 

El árbol de coyol crece en la sabana y en las faldas de la costa pacífica principalmente en la provincia de Guanacaste. Se asegura que los mejores árboles son los de la zona costera: es decir los de estas regiones dan un mejor vino, quizás a causa del ingrediente salino. Pueden crecer en conjunto o aisladamente y, pueden formar verdaderos bosques. En el primer caso depende de su diseminación del ganado vacuno ya que este se encarga de dispersarlo.

 

El coyolero como se llama a quien corta y prepara todo el proceso desde la corta del árbol hasta el obtener el vino. Usualmente va a esos lugares con una cureña y suele cortar de dos a cinco árboles, los cuales transporta generalmente al lado de su casa de habitación donde prepara y vende el apreciado vino.

 

Los árboles se cortan a partir del inicio del mes de septiembre. El mes de marzo es el último periodo en que pueden cortarse (a fines de marzo o a principios de abril es el apogeo según me comenta Don Luis Chavarría) Los que se cortan posteriormente a estas fechas tienen más posibilidades de que se sequen.

 

Si usted quiere obtener mayor cantidad del vino del árbol, evite cortar las palmas, es decir, las hojas de coyol propiamente dichas.

 

Algunos coyoleros suelen usar llantas de camión, a manera de amortiguadores, para evitar que los troncos se golpeen a la hora de bajarlos de la cureña. Los árboles permanecen al aire libre, es decir que es en esta época en la cual se cortan los árboles y se vende el vino, lo cual existe más que nada por pura tradición ya que en el invierno también es factible obtenerlo, si se mantienen aislados los troncos del suelo, lo cual se hace muy fácilmente mediante la colocación de algunos troncos o palos pequeños sobre los cuales se monta el tronco del coyol.

 

Luego para evitar que se llene de agua la así llamada canoa o pila, se mete la punta (el cogollo) dentro de algún recinto techado o simplemente se cubre con algo.

 

Sin embargo tanto en verano como en invierno si no se va rebanando el así llamado "palmito" del lado inferior de la canoa, es seguro que el árbol se "seque".

 

Es muy importante saber la época exacta en la que debe cortarse el árbol. Aparentemente la época exacta en que debe de cortarse el árbol no tiene que ver con alguna explicación científica en vista de que el pueblo las desconoce y se basa solo en una serie de opiniones vagas y creencias (algunas con viso de tradición casi legendarias) que se han extendido de generación tras generación, al parecer desde los tiempos en que los indígenas civilizaron estas tierras de Centroamérica.

 

Los coyoleros que conocen del tema concuerdan en que los árboles deben de "botarse" cuando haya marea alta. Ellos se orientan desde el punto de vista meteorológico muy empíricamente es decir calculando de acuerdo a la posición de la luna. Se dice que al haber mayor atracción de la luna hacia los objetos terrestres está más próxima a la tierra, la savia de los árboles asciende y por lo tanto se llenan las cavidades del tronco con más savia.

 

Luego se corta el cogollo, el que normalmente puede alcanzar a unos dos metros de longitud. Solamente se deja un pedazo de cogollo de unos cincuenta centímetros. Se cortan las largas espinas que crecen de abajo hacia arriba a lo largo del tronco, el cual manifiesta a primera vista tener una especie de franjas circulares desde abajo hasta donde empieza el cogollo. Y como ya lo mencionamos si se desea obtener más vino, se deben cortar las palmas. La única explicación que cabe al respecto es que de esta manera se aprovecha la savia que corre también por la hoja.

 

La apertura de la canoa se debe de hacer necesariamente dos o tres días después de haber cortado el árbol, de lo contrario el árbol también se puede secar. El coyolero procede con cuidado a abrir la canoa a más o menos cincuenta centímetros de la punta del resto del cogollo. La profundidad de la canoa o pila debe de ser aproximadamente de diez centímetros. La anchura debe medir casi lo mismo. La longitud al principio es de unos veinte centímetros, sin embargo esta longitud va aumentando conforme pasen los días, ya que cada día (al principio tres veces al día y luego, en la última semana del mes, dos) hay que ir rebanando la parte interior de la canoa, es decir, lo que se dirige hacia la parte inferior del tronco. En realidad, lo que se rebana es el corazón o parte medular del tronco, lo que el coyolero llama "palmito". Según la tradición la canoa y los siguientes cortes deben de ser hechos por una sola persona. Esta debe de tener "buena mano" o "buena vista" para que así no se seque y se resienta el árbol, aunque esto casi no sucede.

 

Después de haber realizado esta abertura más o menos en tres o cuatro días se puede recoger una espuma gruesa que en realidad es la primer sustancia que genera el coyol la cual es muy dulce y empalaga. En realidad es prácticamente agua con azúcar. La explicación de esta es muy sencilla ya que la savia es muy rica en azúcar. De los cuatro a ocho días se produce el vino dulce fuerte. De hecho a veintidós días el vino fuerte, con un poco de espuma, siendo este el mejor de todos.

 

Algunas tierras son malas para el coyol. Se nos aseguró (aunque no lo pude comprobar directamente) según nos informan que aquellos que crecen en aquellas tierras no aptas, dan vinos malolientes, algunos hediondos a excremento humano.

 

Lo que si nos confirmaron es que el mejor coyol se da en tierra caliente, quizás por esta razón no se acostumbra cortar árboles de coyol en la zona de Tilarán. Finalmente los coyoleros nos informaron que el vino del coyol es una bebida afrodisíaca.

 

 

ENTREVISTAS A COYOLEROS GUANACASTECOS

 

Primera entrevista al Sr. Elías Quesada

Asentamiento campesino Falconiana de Bagaces.

 

Es un gusto para mí compartir con ustedes mis conocimientos acerca del coyol, ya que cada día es menos la gente que conoce de esto.

 

Tengo muchos hermosos recuerdos de cuando nos reuníamos con familiares y amigos para compartir el delicioso vino y comentar acerca de la utilidad de este árbol.

 

Según nos comenta Don Elías no solo se aprovecha el vino del coyol sino también, sus frutas, palmito...

 

El palmito: Este producto se obtiene del tallo del árbol y es muy similar al palmito obtenido del coco, según la información recopilada es muy rico con un sabor un poco dulce pero agradable.

 

El vinagre: Este se obtiene con el paso de los días, porque el primer líquido que emana del tallo es dulce, luego pasa a ser más fuerte hasta llegar a convertirse en un líquido ácido parecido al vinagre y su función es igual que se pueden hacer chileras también.

 

La fruta: Esta en su estado maduro es muy buen alimento para el ganado, el cual al ingerirlas ayuda en su proceso de germinación. La semilla de esta fruta está protegida por un grueso caparazón y en su contenido hay una pulpa dura y blanca muy similar al coco. Con esta se pueden hacer cajetas e incluso leche.

 

Los frutos cuando están lo suficientemente maduros son amarillos y pueden ser comestibles. La pulpa es dulce y chiclosa. Uno de los pasatiempos de los niños de antes era andar "rumiando" estas frutas.

 

Una vez que la fruta se secaba era más fácil el poder quebrar la cáscara y extraer el contenido.

 

Los campesinos antes solían realizar viajes en familia por la finca para poder recolectar la mayor cantidad de coyoles los cuales utilizaban luego para alimentar a las gallinas. Esto se hacía manualmente quebrando uno por uno la dura cáscara del coyol y sacando su contenido quebrándolo también para poder ser consumido por los animales domésticos.

 

Un dato curioso es que los coyoles favoritos para recolectar eran los "rumeados" por el ganado por que eran más fáciles de quebrar y algunos piensan que tenían hasta mejor sabor.

 

Segunda entrevista al Sr. Manuel Benito Herrera González.

Asentamiento campesino Falconiana de Bagaces.

 

Este Sr. Donde nos dice que el piensa que "esta costumbre difícilmente se perderá en el campo mientras exista un árbol de coyol en el monte por que las personas del campo tienen este conocimientos en la mente y los dan a conocer de forma oral y practica".

 

El también nos dice que es más difícil que se conozcan esta cosas en las ciudades por no hay árboles de esta clase y además la gente tiene ocupaciones diferentes.

 

Don Benito afirma "el coyol es una bebida rica y la recomiendo porque además de eso es muy alimenticia".

 

Al igual que Don Elías coinciden en que ahora es un buen negocio vender vino, según nos informó una botella vale más de más o menos 1000 colones o más. Tomando en cuenta que un solo árbol puede dar más de tres litros diarios.

 

Nos relata también que el vino forma parte de nuestra historia, nuestros abuelos he incluso padres se aventuraban en ocasiones especiales ojala después de una "parranda" a buscar palos caídos y abiertos por todos lados, no importaba las distancias del camino por recorrer lo que importaba era el resultado: todos borrachos durmiendo en el tronco del árbol, en ocasiones hasta se los encontraba el dueño en ese estado.

 

Otra costumbre era cargar siempre con unos carrizos en los zapatos (una planta que se utilizaba como pajilla) Eso era símbolo que se iban a enfiestar en las noches buscando el ansiado liquido de algún palo caído.

 

Tercera entrevista al Sr. Filiberto Badilla Quesada.

Asentamiento campesino Falconiana de Bagaces.

 

El nos dice que el significado era también el hecho de compartir en familia, ya que hasta los niños participaban y bebían del vino más dulce y poco fermentado.

 

Sin embargo el tener palos de coyol tenía una gran importancia en las economías de los hogares. El coyol era un excelente negocio. Antes había muchas personas que se dedicaban solo a venderlo y resultaba tan bueno como vender licor hoy en día.

 

Nos cuenta que en muchas ocasiones observó que las personas que tenían fincas muy grandes donde crecía mucho coyol, lo cortaban para venderlo, así el comprador vendía los palos o buscaba a alguien que le hiciera este trabajo continuo y poder vender el vino diariamente en grandes cantidades.

 

El transporte se realizaba en carretas con grandes cantidades de troncos desde 30 a 40.

 

El árbol se seleccionaba de acuerdo a la "jupa" si era pequeña significaba que iba a producir bastante "jugo" pero si por el contrario era grande era signo que no produciría suficiente "jugo".

 

Como opinión personal nos dice que espera que esta tradición no se pierda porque nos caracterizan a nosotros los guanacastecos. Además es una bebida natural que naturalmente se fermenta he incluso se hace más fuerte si se pone al sol. Incluso si la persona la consume y toma el sol los efectos se hacen visibles inmediatamente.

 

También nos dice que todo en torno a este árbol tiene mucho misterio y por lo tanto viene a formar parte de una leyenda que podemos transmitir a las futuras generaciones.

 

Por ejemplo se tenía la creencia que si una mujer observaba cuando alguien estaba abriendo una canoa, el palmito se ponía negro y se podría.

 

Otro mito era el pensar que la espina de coyol era muy peligrosa si alguien se jincaba y podía producir calenturas y malestares. Esto hacía que los coyoleros fueran aún más cuidadosos a la hora de abrir un palo. Entre otros mitos...

 

Las personas que ejercían este trabajo eran señores con experiencia y por lo general mayores, no importaban los sectores sociales, por que el que no lo hacía por dinero lo hacía por diversión para pasar el rato con los amigos u olvidar penas.

 

No considera que lo que haya hecho permanecer esta tradición es por el simple negocio sino por el simple agrado a la bebida sumándole su efecto narcótico.

 

Además el buen vino solo se puede producir solamente en verano, en invierno no porque el vino se "agualotea" o llena de agua y se pone el vino alaste, hediondo y agarra gusanos. Por lo anterior es muy difícil producir vino durante todo el año. Sin embargo en verano se puede hacer a diario especialmente en las zonas más calientes de Guanacaste siendo estos conocimientos heredados también por los antiguos aborígenes.

 

Cuarta entrevista al Sr. Jarvín Viales Angulo.

Cartagena de Santa Cruz, Guanacaste.

 

De acuerdo a la entrevista del Sr. Viales, el nos dice que debido a los efectos de esta bebida en el caso de nuestros aborígenes y ahora en nuestros tiempos causaba que se diera con más continuidad el ingerir esta bebida es como decir hoy en día el licor (quien más bebe más quiere) por ejemplo grupos familiares practican esta práctica desde su primer inicio como proceso y hasta su final como venta.

 

Cada actividad que giraba en torno hacia que estas formaran parte de una tradición en Guanacaste por ejemplo en la zona de Cartagena de Santa Cruz la familia Castañeda tenía una hectárea de coyol y cada año cuando era la época más o menos entre marzo y abril se cortaban de 10 a 15 árboles de coyol y por la noche se realizaba un desfile en esa casa, su costo era de 25 centavos; actos como este se convierten en tradición cuando hay una secuencia relativamente perenne siempre que se manifiesta y además de manifestarse se lleva a cabo por la mayoría de la población, no solo es un sector sino que la población en general manifiesta una conducta durante todo el tiempo que se presente la oportunidad es el caso también de las rosquillas en semana santa una gran cantidad de personas realizan esta actividad pero después de esa fecha solo unas pocas continúan.

 

Según Jarvin Viales Angulo la tradición no se pierde, por ejemplo en el Arado de Santa Cruz todos los años realizan una actividad llamada "la coyolera" en la familia Oquendo siendo ellos los que realizan esta actividad en donde llegan dúos, tríos, marimbas, ventas, tamales y en una noche específica que es la actividad más fuerte donde llegan muchas personas y hay difusión por diferentes medios. Ese día usualmente hay borracheras y fiesta a causa del vino del coyol para compartir con amistades, familiares y conocidos.

 

Los jóvenes hoy en día son poco para practicar esta tradición. En Semana Santa lo hacen con el fin de invitar algunas amistades quienes vienen de la meseta central a participar de una coyolera y ellos atraídos por la idea van y consumen coyol no necesariamente por o para emborracharse, sino por probarlo.

 

Quizás el vino de coyol se este disminuyendo, pero esta actividad se da en familia lo que permitirá que alguien lo siga practicando. Aunque la cantidad de árboles disminuirá y pocas son las personas que los están dejando para explotarlos más adelante y seguir manteniendo está tradición, algunos por ejemplo utilizan los terrenos para la ganadería.

 

Ahora con relación a 15 años atrás la coyolera ha disminuido.

 

Otro lugar en el que se practica esta actividad es Nambí, uno de los factores que interviene para que esto se este dejando de practicar sea que por tantas facilidades de estudio los jóvenes buscan como profesionalizarse y por tal motivo tienen que irse a otros lugares y dejar lo que en su hogares como tradición se hacía, pero llegara un momento dado en que estos niños y jóvenes sea por pensión o algún otro motivo que regresaran a sus tradiciones que fueron transmitidas por sus padres esto hablando en el sentido de que fueran profesionales pues otros probablemente sigan con está tradición directamente, si podemos decir que esta tradición no se podrá perder, pero si se sectorizara en ciertas partes de la población y ciertas familias.

 

Guanacaste es una provincia rica en cuanto a tradiciones y cultura, por esto es que debemos mantener lo autóctono, lo nuestro.