Leyenda

La academia de las brujas

Hace mucho tiempo contaban nuestros abuelos que una mujer ama de casa siempre pendiente de sus hijos y de su esposo; ya estaba harta de las labores domésticas ya que nunca tenía tiempo para sí misma.

Una noche estresada del oficio soñó que era una gaviota volaba libremente por el campo.

Al día siguiente se levanto muy de mañana a comprar el pan del desayuno, la pulpería más cerca quedaba a quince minutos caminando, como a la mitad del camino se encontró una mujer de avanzada edad que dejara de sufrir que buscara ayuda que ella sabia lo que necesitaba.

Así la mujer aprovechándose de los sufrimientos de la señora le propuso hacerse bruja de esa manera podía hacer lo que quisiera con los hombres además podía cumplir su sueño de volar.

La pobre no lo pensó dos veces y se fue, al llegar a aquella casa vieja pero amplia pidió que le enseñaran el oficio de ser bruja.

El primer paso fue enseñarle pociones para atrapar hombres con varios elementos de la naturaleza principalmente con aquellos que el ambiente desecha (estiércol, animales muertos, etc.).

Como la mujer lo que deseaba era volar la bruja mayor le empezó a dar lecciones.

Se subió al balcón y le dijo el primer paso es agarrar la escoba con la mano izquierda el segundo persignarse al reves luego decir "sin Jesús y sin María Santísima".  Y así tirarse del balcón para alzar vuelo.

Después de tanto ensaño le toco el turno sin pensar en lo que le iba a pasar siguió los pasos al contrario como se los había dicho la bruja ya que a pesar de todo lo malo no podía olvidar sus creencias religiosas, la pobre a del miedo agarró el palo con la derecha pero sé percinó correctamente y dijo: "Con Jesús y con María Santísima".

La pobre se tiró se dio unos golpes en el suelo y como callo de frente se apió todos los dientes.

Dice la leyenda que esta mujer no solo pena por la perdida de su familia sino también por sus dientes que del suelo y el golpazo dejo perdidos en el campo.

Las brujas mujeres mentirosas no solo se aprovechan de la inocencia de sus victimas sino también de los sueños e ilusiones de las personas.

La mejor academia de la vida es la de la brujería, sino la de la experiencia que dan los años al transcurrir el tiempo.